El tipo es demasiado listo, siempre tiene una respuesta contundente, no obstante, es amable, cortés, consciente, jamás se le ve impaciente ni arrogante sobre cualquier tema que se le pregunte.
Uno quisiera tener a Noam Chomsky como maestro sobre cualquier cosa que se nos ocurra: matemáticas, Lingüística, política, Teoría de la Comunicación.
Es el terror de los líderes de opinión, amantes del chayo, como se suele decir. Nunca lo he visto incómodo en una entrevista, no hay pregunta que no responda, siempre sereno, calmado.
Básico para intentar la comprensión de la sociedad en que vivimos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
SE VALE COTORREAR